Antes muerto que llamarle hermano (Brynden Blackwood)

Incluso a esas horas de la mañana el gran salón del Fuerte de la Noche tenía gran revuelo, no era algo normal siendo tan temprano, pero esos días poco habían tenido de normales para los hermanos juramentados. El revuelo causado por la segunda elección del Lord Comandante de la Guardia de la Noche aún estaba en el aire, había sido una competencia reñida, por lo menos al inicio, tras cinco votaciones un joven que no tenía más que un par de años que Lothar acabo obteniendo los dos tercios de las fichas y con ello se alzo como el nuevo líder de los hermanos de negro. Todo el mundo sabía que Lord Tormund era uno de los más fieros guerreros y admirados de la guardia, sin embargo el hecho de ser tan joven hizo pensar al Bracken que acabaría por perder, tendría que pasar toda la siguiente luna puliendo la armadura de Seymour, más conocido entre los hermanos como "el tuerto", por una apuesta. Lothar nunca había entendido el porque de aquel sobrenombre, pues Seymour tenía dos ojos perfectamente funcionales en su rostro, cada vez que preguntaba sobre el tema el salón se llenaba de risas, incluidas la del aludido, al final optó por dejar de preguntar.

Se sirvió un trozo de pan blanco, huevos y panceta, el que acompaño con una jarra de hidromiel para ayudarse a entrar en calor. Se sentó junto a un par de sus hermanos que todavía hablaban sobre la cara del viejo Connington cuando un chico, que debía tener la mitad de sus años y jamas hubiese visto a uno de Los Otros, le arrebatase un cargo que el hombre pensaba era suyo por derecho. Lothar partió un pedazo de pan sin prestar mayor atención a la conversación, en especial porque no compartía la alegría de sus entusiastas compañeros de mesa, Lothar había puesto su ficha por el Connington asi que sentía esa como una derrota propia. El Bracken no podía comprender como era que había ganado, por muchos años que llevase en la guardia, por muy buen peleador que fuera, si volvían los caminantes blancos... ¿No era mejor estar bajo el mando de alguien que participase en la batalla del amanecer?. La experiencia es algo que solo se obtiene con el paso del tiempo y a sus ojos era un bien que no debía ser desperdiciado, pero al parecer el carisma de Tormund era más que suficiente, le costaría anteponer el titulo de lord comandante ante su nombre.

Pero Lothar no olvidaba que, en comparación a muchos de sus hermanos negros, él no dejaba de ser un novato, su misma posición no era del todo diferente que la del Lord Comandante. En su mente no podía dejar de pensar que de haber jurado antes como un hermano de la guardia, quizas su nombre podría haber sido seleccionado. Era un pensamiento tonto y lo sabía, primero porque no había nada que hacer a esas alturas, segundo porque aunque había tenido la intención de hacerse hermano de la noche cuando fuese solo un niño, su prioridad había sido armarse caballero bajo los ojos del guerrero. Quizás no era el nuevo Lord Comandante, probablemente nunca lo sería, pero era de los pocos que tenían un titulo en ese castillo, uno que ni siquiera el juramento que hiciese en el improvisado septo del Fuerte de la Noche podría quitarle, pues no era un apellido o titulo que obtuviese por sangre, era uno de fe. Ser Lothar Bracken se echó un pedazo de pan y panceta a la boca para luego beber algo de su hidromiel mientras trataba de incorporarse a la conversación de sus hermanos sin buenos resultados.